Muchas veces como usuarios de un vehículo nos habrá tocado recargar el circuito del aire acondicionado en nuestro taller de confianza. Existe una pregunta que debemos plantearnos en ese momento, ya que el circuito de aire acondicionado es estanco y no debería en teoría tener ninguna fuga, aunque sabemos que en la práctica esto no es así. La pregunta es: ¿Tiene mi vehículo una pérdida en el circuito del A/A?
Para poder responder a esto en el taller dispondremos de un colorante fluorescente y de unas gafas especiales para poder detectar la pérdida de ese colorante. La forma correcta de actuar en taller es rellenar en una primera ocasión el circuito con fluido R134 (actualmente en la mayoría de vehículos) y con dicho colorante, y controlar el tiempo que tarda el circuito en descargarse.
La pérdida de fluido puede ser causada por un pequeño poro, o de una pérdida importante a través de una junta o alguno de los elementos del circuito. Dependiendo del tiempo que tarde en descargarse el circuito puede que no se necesario reparar el vehículo por el momento, hasta que la pérdida vaya a más (por ejemplo si tenemos que hacer una carga cada dos años).
Circuito del aire acondicionado
El circuito del aire acondicionado actualmente se rellena con un fluido denominado R-134. En vehículo muy viejos podemos encontrar circuitos con fluido R-50, aunque la mayoría han sido adaptados para la nueva normativa. El circuito a su vez está compuesto por el circuito de alta presión y el circuito de baja presión. En la siguiente fotografía podemos comprobar los elementos del aire acondicionado:
Compresor:
Es el encargado de comprimir el gas a una alta presión para lograr su conversión en líquido. Viene accionado por la correa de accesorios del vehículo y se activa desde los mandos del aire acondicionado o climatizador del interior del vehículo. Para su lubricación el circuito debe tener una pequeña cantidad de un aceite específico y en ocasiones puede ser necesario rellenarlo, de no hacerse puede derivar en el gripaje interior del compresor y ser necesaria su sustitución.
Condensador:
Se trata de un radiador situado en la parte delantera del vehículo, incluso por delante del propio radiador del circuito refrigerante. Con las altas presiones generadas por el compresor se genera también una alta temperatura en el fluido R-134. Al hacer pasar el fluido comprimido por el condensador se produce una fuerte bajada de temperatura, consiguiendo finalmente la transformación del fluido de estado gaseoso a estado líquido.
En el condensador tendremos alojado el filtro deshidratador, encargado de filtrar el circuito y eliminar las posibles humedades que pudiesen derivar en daños en el circuito.
Válvula de expansión:
A la llegada del circuito al habitáculo, justo antes del evaporador se encuentra la válvula de expansión. Es la encargada de distribuir el líquido en el evaporador consiguiendo una caída extrema de la presión en el circuito, por la cual el líquido vuelve a su estado gaseoso y se provoca una fuerte bajada de la temperatura.
Evaporador:
Se trata de otro radiador, esta vez alojado en el habitáculo del vehículo, por debajo del salpicadero. Como hemos comentado el fluido vuelve a su estado gaseoso en el evaporador, por lo que se provoca una fuerte bajada de la temperatura en el circuito.
Mediante un sistema de ventiladores y trampillas el climatizador aprovecha dicha bajada de temperatura para refrigerar el habitáculo, dependiendo de si se trata de climatizador bi-zona, con trampillas para la zona trasera, etc.
Tras el evaporador el fluido R-134 vuelve al compresor en estado gaseoso, donde se vuelve a completar todo el proceso.
Como hemos observado el circuito del aire acondicionado funciona a altas presiones, por lo que los materiales deben tener una alta resistencia. Además en una gran parte del circuito el fluido tiene forma gaseosa, con la facilidad que ello conlleva para una posible pérdida del mismo por un poro minúsculo.
Es por ello que, dependiendo del vehículo y el tipo de pérdida, recomendamos que no sea reparada la misma en según qué ocasiones: cuando la pérdida no es importante y la reparación tiene un alto coste. Las tuberías y elementos del circuito tienen un precio elevado, por las necesidades constructivas que ya hemos comentado, y tenemos que sopesar el costo de las cargas del circuito con el de la sustitución del elemento afectado.
En el caso de una pérdida por el evaporador para su sustitución será necesario en la mayoría de ocasiones el desmontaje completo del salpicadero, con todo lo que ello implica, además del propio coste del evaporador.
Es importante por lo tanto localizar correctamente la pérdida del fluido refrigerante, y eso tu taller de confianza podrá hacerlo mediante el mencionado colorante. Debemos tener cuidado con las ofertas que salen a comienzos de verano “recarga del aire acondicionado 20€” puesto que seguramente para poder ofertar ese precio únicamente hagan un rellenado del circuito sin colorante ni aceite de compresor, no pudiéndose posteriormente localizar la pérdida y con el riesgo al no controlar el aceite del circuito de posible gripaje del compresor. Si pasado un mes vuelves a ese taller reclamando que tu circuito ha vuelto a perder todo el fluido seguramente lo único que puedan ofertarte es una nueva carga, esta vez con colorante y a un precio mayor.
A la hora de recargar el circuito la forma correcta de proceder es sacando todo el fluido a la máquina específica para ello, procediendo a su reciclado. Tras ello se rellenará el circuito con la cantidad de fluido necesaria dependiendo de cada modelo, así como el colorante y el aceite de compresor en caso de ser necesario. El reciclado es un proceso lento en el que la máquina estará ocupada, pero que nos asegura que la carga va a ser realizada correctamente y con la cantidad exacta.
Por todo esto debemos de asegurarnos de que el taller en el que vayamos a hacer la carga de fluido sea de confianza y haga la misma correctamente, ya que de podemos ahorrar así mucho dinero en futuras averías o nuevas cargas de fluido innecesarias.
En el caso de que nuestro vehículo tenga una pérdida de fluido considerable tendremos irremediablemente que reparar la misma. Además el vehículo habrá perdido nuevamente el fluido, por lo que tras la reparación se deberá proceder de nuevo a la carga del circuito. No existe otra forma viable para comprobar la pérdida en la gran mayoría de ocasiones salvo con el colorante, por lo que esta es la mejor opción para el taller a la hora de localizar la pérdida.
He leído en ocasiones por Internet reclamaciones de usuarios descontentos con su taller por esto. Espero que esta entrada ayude a disipar todas las dudas que pueda haber sobre el aire acondicionado, y ayudar también a conocer por qué el taller ha tenido que realizar una carga previa a la reparación de la pérdida.